Estas palabras son la traducción poética de una afirmación familiar entre los Carmelitas y que viene ya desde el Papa León XIII: “El Carmelo es todo de María”. El día que los Carmelitas celebran el día de todos los santos del Carmelo, 14 de noviembre, rezan precisamente así: “Carmen de nuestra Señora / al despuntar la alborada / canta música callada / en tu soledad sonora”. Esta estro-fa, de inspiración sanjuanista, cae también perfectamente para esta festividad de Nuestra Señora del Carmen, 16 de julio, La Virgen María bajo su advocación del Carmen, título que le viene de la cordillera del Mon-te Carmelo, donde los primeros Carmelitas le dieron culto.
Pablo VI reconocía que esta devoción a la Virgen bajo el título del Carmen fue en un principio devoción en el interior de la familia del Carmelo; pero añadía que tal devoción salió de los límites estrechos de la familia carmelitana para ser compartida por todo el pueblo de Dios, alcanzando verdadera difusión, universalidad.
Aquí en Santa Cruz, con su mar y su gente, celebra a la Virgen del Carmen, aunque este año por motivos de pandemia no puede haber procesiones ni con gente de a pie por sus calles, honrémosla desde los actos de culto que ofrecemos en su honor como un gesto de gente noble y agradecida.
San Bernardo, dedicó a la Virgen, invocada como Estrella del Mar, el siguiente texto: Si están a punto de ahogarte las olas de la soberbia, la ambición, la envidia, la rivalidad, mira a la Estrella; invoca a María, Estrella de la Mañana.
Ángel F. Mellado